"Tenerife, una tierra ùnica"

Lugares de interés paisajístico

El Parque Nacional del Teide, en Tenerife, ha sido declarado por la UNESCO como Patrimonio Humanidad. El organismo destacó los valores paisajísticos y geológicos de un lugar que es visitado al año por unos cuatro millones de turistas. El Teide es un enclave protegido de casi 20.000 hectáreas -el quinto parque español en extensión-, rodeado por una corona forestal de 46.000 hectáreas. Se trata de una formación volcánica situada en su mayor parte a una altitud de 2.000 metros, que llega a alcanzar en su punto más alto los 3.718 metros, lo que lo convierte en el pico más alto de España. Además de su inestimable importancia geológica, al mostrar la evolución completa de la formación de las islas volcánicas oceánicas, destaca por su excepcional biodiversidad, al albergar cerca de 50 especies endémicas de flora y fauna.

Ecosistemas singulares

En islas de considerable altura, como Tenerife que supera los 3.000 metros, podemos encontrar un amplio abanico de ecosistemas. Comenzamos pues en primera línea de costa, donde se encuentra el cinturón halófito costero que aparece en todas las islas e islotes con especies como Frankenia spp. o Astydamia latifolia. El archipiélago canario reúne una extraordinaria diversidad ecológica que, a simple vista, se aprecia en el inusitado contraste de paisajes naturales que alberga, donde frondosos bosques de laurisilva comparten protagonismo con insólitos desiertos de arena y lava, entre otros ecosistemas también de apreciable notoriedad. El gradiente térmico altitudinal unido a la influencia de los vientos, la orografía insular que determina una profusa variedad microclimática y los tipos de suelo de origen volcánico. Éstos destacan además por sus singulares comunidades animales y vegetales, que incluyen interesantes endemismos canarios y macaronésicos.

Fauna y Flora endémica de Tenerife.

La abundancia de microclimas y de hábitat se refleja claramente en la vegetación insular, formada por una flora rica y variada, con más de 1.400 especies de plantas superiores, entre las que destacan numerosos endemismos tinerfeños y canarios. Lamentablemente, una parte importante de la flora endémica se encuentra en la actualidad gravemente amenazada por actividades humanas, tales como el desmesurado desarrollo de los núcleos turísticos, la construcción de carreteras y la tala de algunas zonas boscosas. La vegetación natural es muy variada: hay casi 500 especies diferentes, de entre las que destaca el drago, el tajinaste y la siempreviva. La vegetación varía según la situación y la altura; en las zonas orientadas al norte y noroeste, más húmedas, hay plantas mesófilas (lauráceas, brezales), mientras que en las del sur y suroeste, con muy pocas precipitaciones, predominan las especies xerófilas. En zonas elevadas aparecen pinares frondosos, como los de la isla de Hierro.

En cuanto a la fauna, existen en Canarias más de 6000 especies de invertebrados. La fauna posee especies exclusivas, como el lagarto de Hierro y la rana de San Antón. Hay más de 70 tipos de aves (avutardas, herrerillos, ponzones, alpispas, petirrojos y canarios, entre otros). En las costas del archipiélago se obtienen especies como sardinas, chicharros, atunes y las viejas, especie que se da en muy pocos lugares de la Tierra. La corriente fría que Canarias, que refresca las temperaturas marinas en estas aguas de latitud subtropical, permiten la coexistencia del delfín mular. Las características oceanográficas, la calidad del plancton que les sirve de alimento y la temperatura de las aguas, así como la práctica inexistencia de plataformas interinsulares hace que el avistamiento de cetáceos sea una experiencia tan fácil de vivir.

La isla tenerifeña, es un lugar espectacular para vivir, tanto para las especies de la flora y la fauna, como tambièn para todas aquellas personas que disfruten de la vida sana y la naturaleza.